Los hechos tienen lugar después de que el mandatario, Macky Sall, anunciara el aplazamiento de las elecciones presidenciales.
Tras una caótica votación, la Asamblea Nacional de Senegal ha decidido trasladar las elecciones presidenciales al 15 de diciembre, prorrogando así el segundo mandato del presidente Macky Sall.
La resolución ha sido recibida con protestas generalizadas y bloqueos en las vías, desencadenado enfrentamientos con la Policía, detenciones y la restricción del uso del Internet en dispositivos móviles.
La votación, que tuvo lugar el 4 de febrero, se celebró en un ambiente turbulento: todos los diputados de la oposición fueron expulsados y escoltados hasta la salida por gendarmes. Pero al final, la decisión de retrasar las elecciones se tomó casi por unanimidad de 105 votos a favor y uno en contra.