Delincuencia. Los vecinos entrevistados afirmaron que en La Yuca no hay delincuencia y cuando aparece alguno llegado de otro sector, los residentes lo atrapan y se lo entregan a la Policía, que patrulla con mucha frecuencia.
Santo Domingo. La carencia que permea el estilo de vida de los habitantes en diversas barriadas del país, no la comparten los residentes del sector La Yuca.
Este sector, que se encuentra ubicado en el corazón del polígono central, es una demarcación donde abundan las noticias positivas y las necesidades básicas se satisfacen de manera simple.
El general retirado, Herasme, quien habita en el sector por más de 50 años, explicó que la distribución del agua, seguridad ciudadana y fuente alimenticia no generan preocupación a los residentes, debido a que los organismos gubernamentales realizan todas las labores.
“Aquí no hace falta nada, gracias a Dios todos los problemas están resueltos”, indicó Herasme.
Declaró que la cantidad de habitantes en sus inicios fue muy reducida, no obstante, en la actualidad se ha incrementado.
Al momento de continuar el recorrido, el estrecho trayecto dirige hacia las viviendas, que parecían no tener divisiones, donde resaltaban los pequeños comercios y el cercano contacto entre todos los hogares.
Durante una conversación con Martín Reyes, quien también es residente, señaló que más que una urbanización, es una vecindad, debido a la unión que existe entre los pobladores en los momentos precarios y adversos.
“Nosotros no somos cualquier, básicamente somos familia porque todo el mundo se conoce y en los momentos malos aquí todo el mundo se ayuda”, enfatizó Martín.
Reyes aseveró que la colonia está situada en la mejor posición, ya que en los alrededores se encuentran los establecimientos de primera necesidad.
“Este es el mejor lugar, aquí al lado tenemos hospital, destacamento, centros educativos y los empleos de todos los que vivimos aquí están ahí mismo”, apuntó.
“Desde los tiempos del gobierno de Jorge Blanco, aquí siempre han llegado cosas buenas porque ellos regalan muchas cosas y brindan muchas oportunidades”, informo Juan Reyes, mientras expresaba las soluciones que han otorgado las generaciones posteriores de la familia del antiguo presidente.
“Primero Jorge Blanco, luego Jorge Mera y por ultimo Orlandito, todos han pasado por aquí a asistirnos”.
El territorio posee una pequeña escuela para los niños y jóvenes, sin embargo, destacaron las ayudas que realizan los empresarios y “ciudadanos de la alta sociedad”, quienes aseguran educación y bienes materiales para el barrio.
“Hasta el colegio Babeque nos da la mano con los niños de aquí; ellos vienen y los niños van”, apuntó.
Servicios
Con relación a la delincuencia, los moradores puntualizaron que los miembros de la Policía Nacional supervisan constantemente el área, además, los desaprensivos que cohabitan en la demarcación son enajenados mentales.
“Aquí la delincuencia no tiene oportunidad de desarrollarse porque la Policía vive metida aquí. Hay veces que algunos delincuentes de afuera vienen a esconderse aquí y la misma comunidad los entregan a las autoridades”, declaró Herasme.
