Desde las redes

Iván Duque advierte de que cambiará los acuerdos de paz sin romperlos

El presidente electo de Colombia, el conservador Iván Duque, advirtió el domingo por la noche tras conocer su victoria de que modificará los acuerdos de paz con las FARC sin romperlos. Esa había sido una de sus promesas como candidato, aunque durante la campaña diluyó ese mensaje para centrarse en otras urgencias. La decisión de Duque, impulsado por el expresidente Álvaro Uribe, puede complicar la aplicación de lo pactado por Juan Manuel Santos. No obstante, trató de lanzar un mensaje de tranquilidad al prometer un Gobierno incluyente.

Los acuerdos de paz con las FARC son el aspecto crucial de la transición de Colombia. Aunque los ciudadanos están cada vez más preocupados por otras cuestiones, como la recuperación económica y la regeneración de la clase política, la reconciliación y la convivencia, en definitiva, el futuro del país, dependen de la conducción de ese proceso.

Duque, que asumirá el cargo el próximo 7 de agosto una semana después de cumplir 42 años, tiene sobre el papel la legitimidad para actuar sin ataduras. El domingo se convirtió en el presidente más votado de la historia de Colombia, con más de 10 millones de apoyos. Obtuvo un 54% de los votos, con una ventaja de más del 12% sobre su contrincante, el izquierdista Gustavo Petro.

No obstante, sus primeras palabras sugieren que es consciente de que deberá responder ante una sociedad profundamente dividida, puesto que su adversario convenció a más de ocho millones de colombianos, otro dato histórico. En este contexto, el exsenador se propuso unir al país y habló, al menos por el momento, con cierta prudencia sobre las modificaciones de los acuerdos.

duque

“La paz que añoramos, que reclama correcciones, tendrá correcciones para que las víctimas de verdad sean el centro del proceso y garanticemos verdad, justicia, reparación y no repetición”, dijo en referencia a la llamada Justicia Especial para la Paz (JEP), el sistema de reparación a las víctimas del conflicto armado —que duró más de medio siglo— que puso en marcha el Gobierno saliente. «Hoy somos todos amigos de construir esa paz y debe ser una paz que, ante todo, preserve ese deseo de permitirle a la base guerrillera su desmovilización, su desarme y su reinserción efectiva, que permita que llegue la inversión pública a los lugares que han sido golpeados por la violencia», agregó.
«Hacer trizas» lo pactado

“Cuando hemos sido francos, cuando hemos sido sinceros como lo hemos sido siempre en el actuar de la política y no estamos mutando de posiciones simplemente para congraciarnos por el aplauso momentáneo o por la oportunidad electorera. Nosotros lo que le hemos dicho a Colombia es que no vamos a hacer trizas los acuerdos, pero a garantizar que la paz sea para todos los colombianos”, mantuvo el político para tranquilizar a sus seguidores. Esta posición no gusta, por supuesto, a los defensores del proceso de paz, al santismo y a la izquierda, pero tampoco entusiasma a los sectores más intransigentes de su coalición. Mientras tanto, Santos le llamó para felicitarle, desearle “la mejor de las suertes” y ponerse a disposición para comenzar el traspaso de poderes.

Duque inicia su andadura tratando de ubicarse en el medio, en algo parecido al centroderecha, aunque es pronto para determinar si lo logrará, ya que las personas que lo han acompañado en su carrera presidencial se sitúan con nitidez a la derecha del tablero. “Quiero decirle al pueblo colombiano que voy a entregar todas, absolutamente todas mis energías por unir a nuestro país. No más divisiones”, afirmó al llamar a pasar “la página de la polarización y de los agravios”.

El futuro presidente busca presentarse también como el relevo de las élites tradicionales. Se dirigió a la “nueva generación” y aseguró que su bandera será “la lucha frontal contra la corrupción, la politiquería y el clientelismo”

El partido nacido de la guerrilla de las FARC, la Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común, emitió un comunicado en el que “expresa su disposición a reunirse con el presidente electo para exponer sus puntos de vista sobre la implementación del acuerdo de paz”. Su líder, Rodrigo Londoño, Timochenko, avisó no obstante de que si Duque olvida la aplicación de los acuerdos de paz “lo único que logrará será llevar al país a un nuevo ciclo de múltiples violencias”.