Caminar por la Ciudad Colonial, como se le llama al centro histórico de Santo Domingo, es una experiencia emotiva por ser un área dueña de una importante historia, de leyendas y añoranzas, escritas algunas con sangre, sudor, lágrimas, sufrimientos, y de acciones heroicas que ilustran el pasado de una nación orgullosa de sus vivencias y sus héroes; sin embargo, se encuentra en medio de una restauración que no parece tener fin.
Ya han pasado seis años desde que fueron iniciados los trabajos de remozamiento de algunas calles y edificaciones de la vieja ciudad, que incluyen el soterrado de cables, restauración del acueducto y alcantarillado, la creación de nuevas aceras y el adoquinado de las vías, en una primera etapa.
Todo este proyecto está en manos del Ministerio de Turismo (Mitur), el Ayuntamiento del Distrito Nacional y el Ministerio de Cultura, el cual es llevado a cabo con un préstamo de 30 millones de dólares aprobado por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
Si bien es cierto que algunos edificios han sido remozados, otros languidecen en una larga espera. Algunas de las calles que han sido remozadas ya presentan cierto deterioro y al parecer todo el entorno está sumido en una restauración sin fin.
La Ciudad Colonial y sus monumentos son un atractivo para los visitantes, pero hay una serie de circunstancias y dificultades que deberían ser analizadas a fondo por las autoridades y los comerciantes del entorno. Recordemos que estas calles dieron vida a la historia “Drama horrendo”, en “Cosas añejas”, del escritor César Nicolás Penson, por lo cual la remodelación debe estar apegada a las tradiciones.
Cómo es posible que un lugar considerado la cuna del Nuevo Mundo, no tenga entre sus souvenirs más importantes pequeñas piezas (réplicas de piedra u otro material) de figuras tainas. O por qué no hay a la venta embarcaciones, cañones o edificaciones coloniales, espadas u otros artefactos de la época, a escala reducida.
Muchas de las artesanías que se venden en las tiendas o gif shops no son representativas a cabalidad de la cultura dominicana, e igual pasa con muchas de las obras de artistas plásticos que exponen sus lienzos en la famosa calle El Conde.
República Dominicana es un país, conocido por los cultivos de la caña de azúcar, café, cacao, tabaco entre otros productos. Sin embargo, en toda la Zona Colonial, como también se le conoce, no hay rutas para que los visitantes sepan todo sobre cigarros, café, ron o chocolate, y los pocos negocios que ofertan estas mercancías lo hacen de manera individual.
Pero como si esto fuera bastante insólito, no existe en toda la ciudad amurallada una ruta que narre y explique todo lo referente a cómo fue la vida antes y después del descubrimiento del Nuevo Mundo. No hay nada que narre las hazañas de los piratas del Caribe, aunque se sabe que estos filibusteros y bucaneros tenían a la isla la Española como centro de operaciones.
Muralla
La Ciudad Colonial fue un asentamiento que estuvo protegido por una muralla con una hilera de fuertes, y con una considerable batería de cañones para proteger a sus habitantes. En la actualidad se extiende desde el norte de la avenida George Washington (mar Caribe) hasta la calle Palo Hincado.
Llega hasta la avenida Mella y de ahí sigue hasta la avenida Francisco Alberto Caamaño o Avenida del Puerto. Quizás la mención más importante sobre esta muralla, es que casi en su totalidad está abandonada y en los patios de casas de familias comunes.
Estudio
En julio del año pasado en el estudio “Políticas de identidad y revitalización urbana para la reorganización del flujo turístico de la Ciudad Colonial de Santo Domingo”, de la arquitecta Melina Rodríguez, se aconseja el Programa de Fomento al Turismo en la Ciudad Colonial que impulsar el uso residencial.
Además dice que hay que mejorar el nivel cualitativo del sector comercial, desarrollar nuevas alternativas de actividades culturales y aumentar la posibilidad de empleos para los habitantes de la zona.
Según la investigación, realizada por Rodríguez y reseñada en el periódico Hoy como tesis del máster en Gestión y Valoración Urbana de la Universidad Politécnica de Cataluña, se destacan entre los problemas que afectan a la Ciudad Colonial el despoblamiento del casco histórico, la concentración de la propiedad, la poca posibilidad de empleo, el desorden en gestión y planificación.
También el estudio aconseja concluir con la reparación integral de calles, priorizar la restauración y el mejoramiento de edificios coloniales y espacios públicos de manera que se pueda fomentar la rehabilitación de edificaciones particulares.
Etapa I
En la primera fase de la remodelación de la Ciudad Colonial están incluidas, las calles Isabel la Católica y Arzobispo Meriño y los tramos de las vías que la intercepten. A estas vías se les ampliarán las aceras y se pondrán al mismo nivel del pavimento.
También se reorientaría la circulación de vehículos, prohibiría el estacionamiento, para aprovechar al máximo el uso de los espacios por parte del peatón y así ampliar la cantidad de actividades turísticas urbanas y artísticas.
Etapa II
En la segunda fase, que aún no inicia y que estaba prevista para el año 2017, el programa de remozamiento tiene programado intervenir los tramos preestablecidos de las calles Palo Hincado, Arzobispo Meriño, Padre Billini, Arzobispo Nouel, y Las Mercedes. También los tramos de las calles Duarte, 19 de Marzo y la José Reyes.
En esta segunda etapa de revitalización de la Zona Colonial de Santo Domingo, se dispondrá de un préstamo de US$90 millones aportados por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), el triple de lo que se invirtió en la primera fase.
Qué se ha hecho
Según el Ministerio de Turismo, con la inversión se ha hecho la rehabilitación de 10 tramos de las principales calles de la ciudad intramuros (unos 2,750 metros lineales de adoquines), y la ampliación de aceras.
Explican que este Programa, en total intervino unas 850 fachadas (200 remozadas y 650 pintadas).
Y que además se ha avanzado en los trabajos de soterrado del cableado eléctrico y de telefonía y se instalaron 13 transformadores eléctricos que permitirán regular el flujo del voltaje y optimización del sistema de telecomunicaciones.
Patrimonio
La Zona Colonial fue declara Patrimonio de la Humanidad, bajo el nombre de Ciudad Colonial de Santo Domingo el 8 de diciembre de 1990, por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación y la Cultura (Unesco).
En la actualidad es uno de los lugares turísticos más importantes de Santo Domingo y uno de los más visitados por los turistas nacionales y extranjeros en República Dominicana.
Tomado de https://elnacional.com.do