Formación. Toma mil años crear un centímetro de tierra que sirve de sustento en todas las actividades. Daños. La deforestación, agricultura y pastoreo lo hacen desaparecer.
SANTO DOMINGO.-“Para crear un centímetro de suelo, a la naturaleza, en términos general, le toma mil años.
Sí, mil años, para que los microorganismos vayan descomponiendo materia orgánica y convirtiéndolos en suelo”.
Esa aseveración del ingeniero agrónomo, Juan Fulvio Ureña Acosta, viceministro de Suelos y Aguas del Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales, pone en manifesto el maltrato que, en muchos casos, se da a este recurso natural de difícil renovación, que sirve de soporte a la biodiversidad.
Al conmemorarse el 5 de diciembre el “Día Mundial del Suelo”, vale poner en contexto la importancia que esta parte superficial de la corteza terrestre, compuesta por unos doce minerales como nitrógeno, fósforo, potasio, cobre y zinc, que sirven de nutrientes a las plantas y por ende de sustento al hombre.
De ahí, una de las importancias de del suelo que, en un centímetro, puede contener millones de microorganismos que el ser humano usa para todas sus actividades, según Ureña Acosta.
Tierras raras
“En él se encuentran las tierras raras, que son las que contienen los minerales que se extraen para la tecnología que hoy tenemos. Como país insular es vital cuidar el suelo porque representa uno de los activos más interesantes para nuestra nación”.
Sin embargo, de acuerdo al Plan Nacional de Sequía del 2018, se estima que casi el 70 por ciento del territorio dominicano corresponde a zonas desérticas, semiáridas y subhúmedas secas, por lo que se hace necesario mitigar las actividades antrópicas que se llevan a cabo sobre el suelo y evitar que este se pierda.
“Eso que le cuesta a la naturaleza por hacer un centímetro en mil años. El hombre, por las prácticas inadecuadas como la construcción y agricultura, se va arrastrando con las escorrentías de los ríos y llega al mar, y van desapareciendo los suelos fértiles”, comentó Ureña Acosta.
Especifica en base a estudios que cerca de 20 a 500 toneladas por año por cada 16 tareas se pierden en arrastres por lluvias al no encontrar barreras como bosques, líquenes o musgos.
Estas son las razones por la que se debe reflexionar al respecto. A propósito de la ocasión, Medio Ambiente junto a los ministerios de Agricultura; de Economía, Planificación y Desarrollo, así como la Organización de las Naciones Unidas de la Alimentación y la Agricultura (FAO), harán una alianza para fortalecer y eficientizar la gobernanza de los recursos hídricos en las actividades agrícolas y las cuencas para proteger más los suelos.
Cobertura
— Impacto urbano
La cobertura y población urbana mundial ocupa el 7% del suelo, por eso la categorización de los niveles de fertilidad y la necesidad de ordenamiento territorial. El suelo absorbe humedad y radiación que ayudan a mantener la temperatura.
Tomado de https://eldia.com.do