En Brisas del Este y otros barrios de Santo Domingo Este, así como en Los Alcarrizos, el agua no llega desde hace un mes
La desesperación comienza a apoderarse de residentes en el Gran Santo Domingo por la escasez de agua, como consecuencia de la sequía que afecta al país desde el pasado año.
Existen sectores como Brisas del Este, en Santo Domingo Este, que tienen más de dos meses sin recibir agua por las tuberías y para resolver sus necesidades tienen que comprar camiones con el líquido desde RD$1,500 y RD$3,000, conforme expresaron moradores.
Pablo Alburquerque y Francisco Medina, expresaron que un tanque de agua de 50 galones cuesta RD$100. Explicaron que en ocasiones la Corporación del Acueducto y Alcantarillado de Santo Domingo (CAASD) envía algunos camiones, pero que se agota en pocas viviendas.
Betsy Contreras consiguió el pasado domingo un poco de agua debido a que la junta de vecinos logró un camión para repartirla hasta donde alcanzara y ella y sus vecinos fueron beneficiados, pero dijo que están pasando una situación crítica por la falta del líquido.
Mientras que Bienvenido Mesa entiende que la escasez no es tanto por la sequía, sino por trabajos de instalación que hace la CAASD en el sector. En la avenida Ecológica, la CAASD trabaja en la instalación de una tubería de unas 40 pulgadas, que se cree beneficiará a varios sectores de su entorno.
En Brisas del Este se está abriendo una zanja de más de cinco pies de profundidad para, supuestamente instalar tuberías, pero no se ha dicho si es para agua potable o para el drenaje pluvial.
“No es como la gente dice que es por la sequía, eso siempre pasa en estos tiempos, es que la CAASD está trabajando aquí en el sector instalando tuberías, por eso es la escasez”, dijo.
La escasez de agua también afecta a Los Mina Norte y el municipio Los Alcarrizos, donde hay barrios que hace un mes no llega agua, igual en sectores de las partes norte y baja de la ciudad. En el residencial Don Honorio hace tres semanas que no envían el servicio de agua.
En algunos sectores, el agua llega, pero sin la presión suficiente como para llegar a todos los lugares. Las viviendas de la parte alta son las más afectadas porque el agua no tiene presión suficiente para llegar a todos los lados debido a que los tanques de almacenamiento no tienen suficiente suministro para impulsar el líquido.
La campaña de la CAASD
“El agua que desperdiciamos hoy, mañana la vamos a necesitar”, es el lema de una campaña presentada por Felipe Suberví, quien destacó la importancia de que los usuarios cuiden y valoren el agua.
Actualmente, la falta de lluvias mantiene en bajo nivel los caudales de los ríos Haina, Duey, Isa, Mana, Isabela, Nizao y Ozama, los cuales representan las principales fuentes de abastecimiento de los acueductos desde los cuales se suministra el agua potable a la provincia de Santo Domingo.
Según la Onamet, el país atraviesa una sequía estacional, condición que generalmente prevalece hasta el mes de abril.
Ante esta situación, desde la CAASD se han puesto en marcha varias medidas en busca de apalear los efectos de la sequía, sumándose también la campaña “Así No” para orientar y educar a los usuarios.
Medidas implementadas
• Aumento de la flota de camiones cisterna privados para que junto con los de la CAASD se incremente la distribución de agua potable en los sectores más afectados.
• Equipar pozos que estén disponibles en sectores mayormente afectados.
• Reprogramación de los operativos de distribución de agua.
• Intensificar los trabajos de corrección de averías para minimizar las pérdidas de agua en la infraestructura.
• Llamado a la ciudadanía por medios escritos, radiales, televisivos y redes sociales para hacer un uso racional del agua, utilizándola solo en labores esenciales domésticas, de manera tal que se evite el lavado de vehículos y riego de plantas innecesarios.
• El personal técnico de la CAASD se mantiene operando las 24 horas del día, a fin de garantizar que este plan de contingencia se ejecute según lo previsto para que la ciudadanía sea impactada lo menos posible por esta sequía.
