Santiago. Los residentes en la ribera del arroyo Gurabo, en esta ciudad, dijeron sentirse atemorizados por las constantes inundaciones causadas por el desbordamiento de este afluente, que según expresan no da tregua, y con el más mínimo aguacero arrasa con todo.
“Aquí no hemos tenido tregua. Aunque durante el día haga sol, si en la noche cae lluvia, tenemos que salir corriendo para refugiarnos y no ser arrasados por las aguas. En los últimos días, la situación ha empeorado”, expresó Nancy Guerra, residente en Valle Verde.
Dijo que unas cinco familias han tenido que abandonar sus casas debido a que el río destruyó las viviendas. Otros se marchan por temor a inundaciones. Los moradores dicen que las autoridades han estado por el lugar pero que aun no han tomado cartas en el asunto.
Sin embargo, Francisco Arias, director de la Defensa Civil en esta ciudad, explicó que a pesar de que se ha estado limpiando el arroyo, no ha sido suficiente para evitar las inundaciones producto de las lluvias.
De acuerdo con sus declaraciones, al menos mil familias viven en la ribera del arroyo Gurabo, que abarca el populoso sector de Gurabo hasta el Hoyo de Puchula.
“Lamentablemente la cantidad de lluvia que está cayendo en la cordillera Septentrional empeora la situación. El lunes limpiamos el arroyo, pero esa misma noche volvió a llover y volvió a crecer.
“En ese sentido, esas familias que están ahí van a estar siempre en esa vulnerabilidad, lamentablemente, porque es que viven en el mismo río prácticamente y el río siempre busca sus terrenos”, manifestó el funcionario de la Defensa Civil.
