Montecristi. Las 48 familias desalojadas del muro fronterizo en la zona del municipio Pepillo Salcedo protestaron por la exclusión de solares y recursos económicos para construir sus viviendas.
En tanto que el Centro Bahía de Manzanillo para el Desarrollo Regional (Cebamder) expresó su rechazo a las pretensiones del comandante de la cuarta brigada de infantería del Ejército Nacional, de apellido Coronado y encargado de seguridad de la construcción del muro fronterizo en la parte correspondiente a Pepillo Salcedo, de distribuir terrenos urbanos ubicados en Manzanillo a personas ajenas a la comunidad.
Denuncia que los solares son entregados sin ninguna vinculación con la problemática de los desalojos ocasionados por la construcción del muro fronterizo, lo que a su juicio constituye una afrenta al pueblo de Manzanillo.
Manifestación
Los manifestantes se concentraron con picos, martillos y machetes a la entrada de Manzanillo, donde serán levantadas las viviendas en los terrenos entregados por el gobierno, supuestamnete a través del Instituto Agrario Dominicano (IAD).
Junior Antonio Rubens, dijo que apenas recibió 300 mil pesos por el solar y la casa levantada en la zona limítrofe con Juan Méndez, donde el gobierno levanta el muro fronterizo con Haití.
En los casos de Miralba Núñez y de Anelcia Yinet Felipe, apenas recibieron la suma de 200 mil pesos como compensación.
“Con nosotros se está cometiendo un gran abuso. Vinieron y midieron los solares y se los están entregando sin conocer quienes quedaron fuera de la repartición”, expresa Ramón Antonio Acosta, padre Miralba Núñez. En la zona desaloja existe una carretera que comunica directamente hacia Haití.
Acuerdo para apoyo a las familias desalojadas
El Plan Maestro de Manzanillo, resultado de un consenso entre el sector privado, el Gobierno dominicano y la comunidad de Pepillo Salcedo, establece claramente la necesidad de proporcionar viviendas o terrenos a los residentes de Manzanillo que están siendo desplazados por la construcción del muro fronterizo. Sin embargo, resulta inadmisible que se utilice esta justificación para entregar terrenos a personas ajenas a la problemática del muro y, lo que es aún más grave, que no residan en Manzanillo.