Aumentan las quejas entre vecinos de barrios de Baní, debido a los continuos y prolongados apagones que afectan a casi la generalidad de la población, mientras los reclamos por altas facturaciones desbordan las oficinas de la Empresa Distribuidora de Electricidad del Sur (Edesur).
Incendio de neumáticos en las calles por las noches en distintos sectores afectados por los extensos cortes del servicio eléctrico y piquetes durante el día en las oficinas de Edesur, unido a la queja permanente y protestas en medios de comunicación es la nota cotidiana en este pueblo sureño que ha visto en los últimos meses apagones con mayor intensidad. Mientras en el casco urbano que gozaba de circuito 24 horas, ahora los apagones son rutinarios.
Las quejas en Baní
En Baní los apagones afectan incluso al plantel escolar ubicado entre los barrios El Maní y La Saona, inaugurado recientemente, así como barrios Los Tiburones, Cajuilitos, Pueblo Nuevo, Barracones, Las 20 Casitas, Santa Elena, Mejoramiento Social, Pescadores, 30 de Mayo y otros sectores, tanto en la zona urbana como en la zona rural
Protestan en Moca
Mientras que en Moca decenas de ciudadanos también se reunieron ayer frente a las oficinas de la Empresa Distribuidora de Electricidad del Norte (Edenorte), para protestar contra los altos costos de las facturas eléctricas y los constantes apagones que afectan a la comunidad.
Con pancartas en mano, los manifestantes exigieron poner fin al “abuso”, que aseguran no solo perjudica a los mocanos, sino a todo el país. “Queremos un servicio justo y constante”, reclamaron, tras denunciar que los prolongados apagones y las tarifas elevadas están asfixiando la economía de las familias locales.
Los protestantes hicieron un llamado a las autoridades, para que se ponga fin a esta problemática que afecta a los municipes. También varias comunidades de Santiago expresaron su descontento, tanto por los apagones como por el elevado monto de las facturas.