Desde que el iPhone 15 -el último modelo del smartphone de Apple- salió a la venta en septiembre, algunos usuarios se han quejado de que los dispositivos se calientan demasiado al tacto.
La compañía californiana achacó este sobrecalentamiento a un fallo en su sistema operativo iOS 17.
Pero también afirmó que los cambios en las actualizaciones de apps de terceros, como Instagram, están «provocando que se sobrecargue el sistema».
Los usuarios de iPhone se han acostumbrado a que sus dispositivos se calienten más durante la configuración inicial o cuando se realiza una copia de seguridad, debido a la cantidad de potencia de procesamiento que se utiliza y a que el teléfono trabaja horas extras, pero estos problemas con el iPhone 15 han sido más serios.
Descartan riesgo de seguridad
Apple afirmó que el dispositivo puede sentirse más caliente en los primeros días «después de configurar o restaurar el dispositivo debido al aumento de la actividad de fondo.»
La compañía explicó: «Hemos identificado algunas condiciones que pueden causar que los iPhones se calienten más de lo esperado».
Esto incluye un error en el iOS 17, la última versión del software de Apple que es accesible para sus modelos más recientes.
También ha dicho que «otro problema tiene que ver con algunas actualizaciones recientes de aplicaciones de terceros que están provocando que se sobrecargue el sistema», y está trabajando con los desarrolladores de aplicaciones en las correcciones que están en proceso de despliegue.
Entre las aplicaciones culpables del problema están Instagram, Uber y el videojuego Asphalt 9, según Apple.
Instagram ya solucionó el problema con su aplicación la semana pasada.
La próxima corrección de errores de iOS 17 no reducirá el rendimiento de los teléfonos para solucionar el problema de la temperatura del iPhone.
Apple subrayó que el calentamiento de los aparatos no está relacionado con la nueva carcasa de titanio que llevan el iPhone 15 Pro y el iPhone 15 Pro Max.
También descartó que el sobrecalentamiento tuviera algo que ver con el nuevo puerto USB-C, que le permitió cumplir con un mandato emitido por los reguladores europeos.
La compañía agregó que el problema no es un riesgo de seguridad o de lesiones, y no afectará al rendimiento del teléfono a largo plazo.