Desesperados y con temor de hablar, los residentes del sector Los Guaricanos, en Santo Domingo Norte, están atemorizados ante la ola de atracos y el surgimiento de bandas delictivas, lo que los mantiene en un estado de incertidumbre.
Fuera de cámara, por miedo a que los delincuentes tomen represalias en su contra, los comunitarios indicaron que están angustiados y que no viven en paz, debido a los atracos, asaltos y la venta de sustancias controladas, lo que provoca enfrentamientos entre los líderes por disputas territoriales.
Uno de los casos que más llamó la atención ocurrió la tarde del martes 16 de julio, cuando dos individuos ingresaron en una farmacia ubicada en el barrio Batey Estrella. Uno de ellos apuntó con un arma de fuego a la vendedora y a su hija, de unos 3 años, quien la acompañaba.
De acuerdo con lo que se escucha en el audiovisual, los desaprensivos le gritaban a la mujer que abriera la puerta, amenazando con disparar a la niña si se «embalaba» hacia atrás.
«Abre la puerta, te dije, le voy a dar a la niña, le voy a dar», vociferaba uno de los delincuentes, cuya acción quedó captada en cámaras de seguridad.
De igual forma, diversos colmados, almacenes y bancas de lotería que operan en la zona también han sido víctimas del accionar delictivo. Estas han tenido que reforzar la seguridad de sus puertas y ventanas ante la situación y cerrar sus puertas más temprano.
Los comunitarios aseguran que los antisociales se burlan de las autoridades de la Policía Nacional y que éstas no hacen nada al respeto.
Además, consideran que, tras la muerte de algunos «líderes fuertes» de bandas que operaban en el sector, la situación ha empeorado, ya que estos «controlaban» los barrios.
Surgimiento de bandas
Manifestaron su preocupación por el surgimiento de nuevas bandas dedicadas al microtráfico de drogas en la zona, que se suman a las que ya operan en el sector.
Indicaron que la mayoría de los integrantes de estas bandas son adolescentes de entre 15 y 17 años, por lo que consideran necesario reforzar la vigilancia y prestar atención especial en los barrios, escuelas y liceos.
Además, señalaron que en muchas ocasiones se originan balaceras debido a disputas por puntos de venta de sustancias controladas, lo que los mantiene en vilo y con el temor de que una de estas balas pueda afectar a un inocente, como ocurrió recientemente con una adolescente de 16 años en San Pedro de Macorís, quien perdió la vida.
Cuatro muertos de banda que «tenían el control»
Recientemente cayó abatido Erickson Cabrera Luciano, alias «Potrico», quien supuestamente era uno de los líderes de una banda delictiva que operaba en el sector. A «Potrico» se le atribuían varias muertes, incluidos robos, atracos y otros delitos cometidos en distintos puntos del país, con Los Guaricanos como su centro de operaciones.
De acuerdo con los comunitarios, «Potrico» había tomado el control del grupo liderado por «Railin Guaricano», quien fue abatido por la Policía Nacional hace unos meses.
Railin Ferreras Mateo, conocido como Railin Guaricano, murió en un supuesto intercambio de disparos con agentes de la Policía en el barrio Los Ponce, en Los Guaricanos.
Railin era buscado mediante varias órdenes de arresto por diversos cargos, incluidas la muerte de varias personas y agentes de la uniformada. Para dar con su paradero, las autoridades llevaron a cabo la operación Solares con la intención de capturarlo y desarticular su banda.
El 5 de abril también murió baleado Andy Vinicio Henríquez, alias «Kurungo», quien, según se alegó, pertenecía a la banda de Railin. Además, en el mismo mes, Jefre Beltrán, también mencionado en la banda, fue abatido por agentes del orden.