Provincias Dominicanas

Los inagotables tesoros de Cabrera

Este municipio atrae a muchos turistas cada año dado sus hermosas playas y sus destinos ecoturísticos para disfrutar en pareja, en familia o entre amigos.

Cabrera es considerado como el paraíso de la región Nordeste. Lo definen así sus playas vírgenes, ríos acaudalados y cristalinos, así como la abundante pesca que ofrece su localización costera, por las vistas paradisíacas que brindan sus colinas, lo fértil de sus tierras y ganado, por la hospitalidad y empatía de los lugareños y por la actividad diurna y nocturna que presenta, entre muchos otros atráctivos.

Este municipio atrae bastantes turistas cada año dado sus hermosas playas y destinos ecoturísticos para disfrutar a plenitud. Entre sus playas se destacan: Diamante, La Entrada, Arroyo Salado y El Bretón. Además cuenta con cuevas subterráneas, cenotes y lagunas de aguas muy azules.

cabrera

Entre los más visitados se encuentran:

Laguna El Dudú

Un parque recreativo con dos lagos de agua dulce, muy cerca de la playa Diamante, a tan solo 25 kilómetros de Nagua, y es uno de los lugares ideales para practicar el buceo espeleológico, ya que los dos cuerpos de agua están conectados directamente a través de túneles subterráneos, posee una profundidad de 32 m y está rodeada de un denso bosque que recubre los barrancos que la rodean.

Allí podrás encontrar diversas cuevas donde se pueden observar formaciones de estalactitas y estalagmitas que el agua ha ido formando a través de los años. Sin embargo, en la cueva Taína encontrarás el mejor lugar para contemplar el arte precolombino que decora sus paredes de 30 m de longitud.

Está abierta al público todos los días de 8:00 de la mañana hasta alrededor de las 6:00 de la tarde. El permiso para bucear sólo es otorgado a quienes presenten certificación de capacitación profesional en el área. En El Dudú hay un ‘zipline’ el cual es muy famoso y en el que muchos se han lanzado para caer al agua desde una altura apróximada de 10 metros. Probarlo puede ser una aventura emocionante siempre que se haga con prudencia

Laguna Azul (Blue Lake)

A unos pocos minutos de laguna Dudú se encuentra esta pequeña laguna de aguas muy azules y cristalinas, piscina natural formada en las mismas condiciones arqueológicas y acuíferas del anterior, “Agua Azul”, como bien su nombre lo indica posee una agradable y fresca agua de una tonalidad azul turquesa, se apróxima a los 40 pies de profundidad, pero por su claridad es posible observar el fondo. Se dice que el color azul es debido a que sus aguas son subterráneas y en algún punto tienen relación con el mar, la fauna que habita allí es introducida.

Mientras te acercas te vas dando cuenta de cómo la naturaleza ha ido trabajando pacientemente para crear un ambiente agradable y con detalles increíbles. Si miras hacia arriba, al borde de la gruta observarás que algunos árboles decidieron extender sus raíces hasta tocar el suelo.

El Saltadero

Casi en el centro de la localidad, a un desvío de la autopista, se sitúa el lugar idóneo para aquellos que gustan de la aventura, se trata del río El Saltadero, como lo dice su nombre, este cause está adornado por una cascada que forma un charco de tonalidades verdes, donde solo se puede acceder a través de unas escaleras construidas para el fácil acceso al balneario. La entrada a este balneario es gratis.

Playa Arroyo Salado

La Playa Arroyo Salado está compuesta por varios kilómetros de arena dorada, aguas cristalinas, magnífica vegetación y un río que ofrece al visitante un agradable ambiente en contacto con la naturaleza.

Es un lugar perfecto para bañistas quienes después de refrescarse en sus aguas pueden descansar bajo la sombra de los cocoteros y disfrutar de un paisaje maravilloso. También pueden realizar avistamientos de especies endémicas y nativas, y participar en todo tipo de actividades recreativas.

Playa El Bretón

Más adelante, en las afueras de la urbe, justo en la autopista Cabrera-Río San Juan, se ubica la playa El Bretón cuyo encanto se mezcla con un chorro de agua dulce y fría que recorre kilómetros para desembocar allí.