Salud

Investigadores vinculan el consumo de edulcorantes artificiales con el riesgo de padecer cáncer

Los científicos analizaron a más de 100.000 personas de Francia entre 2009 y 2021, a quienes se les pidió llevar un registro diario de sus alimentos.

Un equipo de investigadores publicó recientemente un estudio en la revista Plos Medicine en el que revelan que la ingesta de altos niveles de edulcorantes artificiales eleva el riesgo de desarrollar ciertos tipos de cáncer.

Para llegar a estas conclusiones, los científicos analizaron a más de 100.000 personas de Francia entre 2009 y 2021. A los participantes se les pidió que llevaran un registro diario de los alimentos que consumían y alrededor de la mitad fueron seguidos de cerca por los investigadores durante más de ocho años.

Así, el estudio determinó que los edulcorantes aspartamo y acesulfamo de potasio se asociaron con un mayor riesgo de cáncer, especialmente cáncer de mama y aquellos relacionados con la obesidad, como el cáncer colorrectal, de estómago y de próstata.

Durante el seguimiento se diagnosticaron un total de 3.358 casos de cáncer, de los cuales 982 fueron de mama, 403 de próstata y 2.023 asociados con la obesidad. La edad media al momento del diagnóstico fue de 59 años.

También se descubrió que, en comparación con los no consumidores, el sector de la población que consumía más edulcorantes incluía más mujeres, población más joven, fumadores, personas menos activas físicamente, con mayor educación y más propensos a tener diabetes.

Pese a estos resultados, otros investigadores no vinculados al estudio señalan que no provee suficientes pruebas.

«La relación entre el consumo de edulcorantes artificiales y el riesgo de cáncer es controvertida y se remonta a la década de 1970, cuando se prohibió el ciclamato por estar relacionado con el cáncer de vejiga en ratas, aunque nunca se demostró que fuera el caso en humanos», le dijo a AFP James Brown, científico biomédico de la Universidad de Aston (Reino Unido).

Brown concluyó que, aunque el estudio está «razonablemente bien diseñado» y tiene un tamaño de muestra «impresionante», no proporciona evidencia «lo suficientemente fuerte» para que las instituciones de salud consideren cambiar los consejos actuales sobre dieta.

Tomado de RT