Levantamiento. En la parte alta, esta línea defensiva del norte alcanzaba una longitud de 1,486 varas. Estilo. Construcción ciclópea, fabricada en piedra y tapia
El fuerte colonial de San Antón se encuentra situado en la esquina de las calles General Cabral y la prolongación de la calle Hostos.
En el año 1678 se dio inicio a la muralla y los baluartes del frente norte de la ciudad de Santo Domingo, siguiendo el diseño trazado por Juan Bautista Ruggero.
Siete baluartes de forma pentagonal fueron construidos, a saber: La Concepción, La Caridad, San Lázaro, San Miguel, San Francisco, San Antón, Santa Bárbara y la batería del Ángulo.
El fuerte tenía de alto 2.26 metros.
Construido en la parte alta, la línea defensiva del norte alcanzaba una longitud de 1.486 varas.
El fuerte de forma pentagonal y la muralla, aún subsisten aunque deteriorados y destruidos en parte.
Corte de la muralla
Para prolongar la calle Hostos cortaron parte de la muralla. Hoy en día no se pueden determinar las caras de los flancos, sin embargo, el flanco izquierdo se mantiene visible, así como el terraplén para subir los cañones.
Lo trozos de muralla que aún están en pie, muestran una construcción ciclópea, fabricada en piedra en algunos lugares y en tapia en otros.
En 1922, la logia Flor del Ozama, edifico sobre el terraplén del fuerte, un templo masónico, esta edificación fue destruida por el ciclón de san Zenón, pero fue reconstruida con hormigón armado, luego la logia fue trasladad y el local alquilado a varias familias.
Inicios del siglo XIX
A comienzos del siglo XIX, ya el fuerte había dado señas de deterioro por lo que se procedió a su reparación. Poseía garitas para centinelas, además del terraplén. Un camino de ronda comunicaba los fuertes entre sí.
Durante los trabajos ejecutados a finales del siglo XX, se descubrió la gola del fuerte, es decir, la parte del bastión abierta a la ciudad, en el lado este.
Indicios
Estos indicios vinieron a corroborar que el muro que se conserva en la acera norte de la calle General Cabral, es el flanco izquierdo del fuerte.
El rebajamiento que se hizo a las calles que rodean el fuerte, han dejado al descubierto sus fundaciones, por lo que la altura actual de sus muros es mayor que la que presentaba originalmente.
Dibujo del 1890
En un planito trazado por Casimiro de Moya en 1890, se deduce que el fuerte cubría con sus dos caras, lo que hoy es el último tramo de la calle Hostos y ambas caras se juntaban en la punta, en donde estaba la garita del centinela, en parte de lo que hoy es la avenida Mella.
Es importante destacar que la cara izquierda del bastión que corría diagonal, se encuentra embebida por las construcciones que se levantaron en la avenida Mella.
Restauración
— Finales del siglo
A finales del siglo pasado, se efectuaron trabajos de consolidación y restauración del frente norte, procediéndose a demoler el armatroste que ocultaba el fuerte.
Tomado de https://eldia.com.do