Cientos de agrónomos y técnicos agropecuarios marcharon ayer hacia el Palacio Nacional para reclamar pensiones a 500 de sus compañeros, que mueren de viejo y otros están enfermos en sus viviendas y hospitales, mientras una cantidad similar reciben una miseria de hasta RD$5,000 luego de dejar sus vidas en el campo.
Durante la manifestación que partió desde el Parque Independencia, Danilo Severino, presidente de la Asociación Nacional de Profesionales Agropecuarios (Anpa) deploró la situación del sector agrario en el país, muy diferente a como lo “pintó” el presidente Danilo Medina en su discurso de rendición de cuentas el pasado 27 de febrero
“No podemos estar bien cuando los compañeros en edad de pensión se nos están muriendo, cuando compañeros con hasta 40 años en servicio no son pensionados, y cuando se les pensiona se le baja el salario y se le quita el seguro médico”, manifestó.
En la marcha que fue desviada por la calle Abreu, hasta cruzar la avenida México y salir por detrás de los edificios de las oficinas gubernamentales hasta la doctor Delgado, participaron delegaciones de casi todas las provincias del país.
Recordó al mandatario que durante la campaña por la reelección, en 2015, expresó que a pesar de la importancia de los profesionales agropecuario no tenían condiciones para trabajar y que las escuelas de agronomías habrían cerrados porque los estudiantes no estaban motivados para hacer esa carrera, situación que de acuerdo Severino, se mantiene.
Severino sostuvo que a pesar del conocimiento del presidente Medina sobre la situación, los profesionales del agro siguen laborando en condiciones infrahumana.
Citó el caso de los agrónomos de Cotuí quienes trabajan en un almacén, a pesar de que son la primera fitozoosanitaria en el país.
Advirtió sobre el peligro que significa para el país la amenaza de los problemas sanitarios, no solamente de insectos, sino además de hongos y bacteria.
Consideró que los funcionarios del área hablan mentiras a Medina, ya que no es cierto que existe extensión, a pesar de un amago en San Juan, que no cuajó.
Tampoco hay registro de productores, planificación e investigación.
