Solo se espera el impulso del Gobierno
Este mes hará un año que residentes en los alrededores de la cañada de Guajimía se ilusionaron con el anuncio y la firma de un nuevo contrato entre el Estado Dominicano y Canadá para darle continuidad a los trabajos de saneamiento de ese sistema de drenaje.
Pero poco se ha hecho desde entonces y la gente se ha quedado solo con las expectativas de que algo se hará. El proyecto beneficiaría a unas 350,000 familias.
Desde principio de su gobierno, el presiente Luis Abinader y el director de la Corporación del Acueducto y Alcantarillado de Santo Domingo (CAASD), Felipe Suberví, han mostrado interés en terminar el histórico problema con la visitas y promesas que han hecho a la comunidad, pero el proyecto está estancado.
Dirigentes comunitarios hablan de que el tranque lo tiene Crédito Público que no acaba de firmar unos papeles a pesar del interés mostrado por el mandatario y el director de la CAASD, institución encargada de la ejecución del proyecto.
En agosto del 2021 fue la más reciente visita que hizo al lugar el director de la CAASD cuando, luego de una situación de lluvias generada por una tormenta, se desbordó la cañada, como de costumbre, y derribó varias viviendas dejando una víctima mortal: el señor Sanil Decembrel, de 47 años, y varias familias a la intemperie.
Ángel Fortuna, dirigente de la junta de vecinos de Guajimía, ha llevado todo el proceso y asegura que tanto el presidente Abinader como el director de la CAASD como el gobierno de Canadá han mostrado mucho interés en terminar la segunda etapa de rehabilitación del proyecto y que, incluso, el préstamo fue aprobado.
«Se dice que desde noviembre el presidente Abinader viene para seguir los trabajos y tenemos información de que el presidente dio los pasos pertinentes y el Gobierno de Canadá dio su visto bueno al proyecto, pero no se continúan los trabajos. «Ángel FortunaDirigente de la junta de vecinos Guajimía“
Afirmó que el Ministerio de Medio Ambiente ha hecho todos los estudios de rigor para continuar los trabajos, pero todo está estancado, mientras los moradores esperan se agilice para que no llegue otra temporada de lluvias con gente en situación de alta vulnerabilidad.
Además de la canalización de las aguas residuales y el control en el vertido de residuos sólidos a Guajimía, el proyecto contempla el saneamiento de otras 16 cañadas que confluyen como son la de Buenos Aires, El Indio Derecho e Izquierdo, Flor de Liz, La Ureña, la cañada de Tufí, la de Mauricia, la de la calle 8 con 4, Las Caobas, La Canela y Ciudad Agraria, entre otras.
Los puntos más críticos y que están a cielo abierto son en la parte de Buenos Aires, donde faltan por cubrir alrededor de 64 metros, el Indio Derecho 58 metros y del Indio Izquierdo aproximadamente 300 metros por tapar.
Los trabajos tienen un costo superior a los 138 millones de dólares, con una contrapartida del Estado Dominicano. El Gobierno de Canadá ha mostrado su interés en resolver el problema, como se evidenció el año pasado al firmarse un acuerdo entre la consejera comercial de la embajada de Canadá, Waleska Rivera, y el director de la Corporación del Acueducto y Alcantarillado de Santo Domingo (CAASD), Felipe Suberví.
Canadá dispuso de 50 millones de dólares para continuar la segunda etapa. La primera fue financiada también por ese país. Esta segunda parte comprende una extensión de 8.2 kilómetros, la construcción de unas 500 nuevas soluciones habitacionales, la colocación de 50.93 kilómetros cuadrados de redes para agua potable y alcantarillado sanitario.
También la construcción de una planta de tratamiento para las aguas residuales que generan cerca de 300,000 habitantes, de un emisor submarino que transportaría las aguas desde la planta de tratamiento hacia el mar a una profundidad de 30 metros. Estos trabajos tendrían un costo de US$138,000,000 (RD$6,400 millones) que serían aportados en su mayor parte por el gobierno de Canadá.