Cuando Elías Piña pueda instalar por lo menos dos industrias y explotar lo que se cree existe allí, yacimiento de petróleo, habrá de transformarse de lejana, silenciosa y olvidada, en una población con risueño porvenir.
Productora natural de maní y de café, sus habitantes sueñan con la instalación de una fábrica que permita elaborar este primer producto en aceite vegetal, para aprovechar en la misma región las inmensas cosechas que se recolectan tanto aquí como en Las Matas de Farfán y San Juan de la Maguana.
Las lomas de Hondo Valle, ricas en plantaciones de cafeto, es un aliciente para que también en Elías Piña se instale una industria destinada a la preparación, mejora y selección de ese aromático grano.
Una versión que circula en toda Elías Piña y mantiene optimistas a sus habitantes, es la posibilidad de que exista un yacimiento de petróleo en el sector de La Jagua, a 6 kilómetros al Noroeste de esa fronteriza ciudad.
“De ser así -dijo uno de los funcionarios con quienes se entrevistaron los redactores de VIDA MUNICIPAL DOMINICANA- estamos seguros de que la vida de Elías Piña y sus gentes habrá de cambiar de la tarde a la mañana».
Alrededor de cien mil quintales de maní se cosechan en Ellas Piña. Aparte de que es productora de arroz y de frutos menores en diversidad considerable.
Esa circunstancia obliga a que los caminos vecinales que le cruzan, estén en buenas condiciones. Pero desgraciadamente ello no sucede así.
Sus autoridades claman Insistentemente porque se reparen los caminos vecinales, especialmente los que conducen de Elías Piña a Macasías (36 kilómetros), Elías Piña-Potroso-Jagua, Colonia Sabana Larga – Elías Piña, y que se construya un puente de concreto sobre el río Macasías, ya que las crecientes arrasaron con el de madera, obstaculizando el tránsito por allí.
La reparación del canal de Sabana Larga y su extensión hasta Rinconcitos es también de inaplazable necesidad, por lo que el departamento correspondiente debe dictar las medidas pertinentes.
Anhelo de superación
Por otra parte, Elías Piña tiene anhelo de superación. Hablando con sus ejecutivos municipales se pudo advertir ese vehemente deseo de sus hijos.
Ellos piden la cooperación de los departamentos que puedan ayudarlos a realizar sus grandes ideales.
Entre las necesidades más perentorias de que adolece actualmente se halla un edificio para alojar el liceo secundario; un anexo a la escuela primaria urbana; un hotel de turismo que permita alojar a las infinidades de personas que van allí a conocer sus bellezas y a gozar de su envidiable clima.
Consideran que debe destinarse una suma especial al Ayuntamiento de allí para la compra de terrenos con fines de urbanizarlos, ya que los solares han sido ocupados ya.
También se necesita que se construya la glorieta del parque central, un badén en el cruce de las calles Mercedes y Sánchez, así como contenes en muchas vías, tales como la María Trinidad Sánchez, 30 de Marzo y Mella.
El cabildo contempla la posibilidad de que se instale un reservoir, ya que el actual acueducto es por gravedad. Lo mismo que construirle un filtro al acueducto, ya que el agua entra directamente a las tuberías.
Asimismo, es necesario extender el acueducto nuevos sectores que se han incorporado a la ciudad como consecuencia del creciente progreso que ha experimentado esa colectividad.
Por otra parte, el servido de corriente eléctrica también hay que extenderlo, especialmente en el sector sur del cementerio.
El cabildo tiene que enfrentarse a la terminación de las calles Pedro Santana, José J. Puello, Gastón Deligne, Colón y 30 de Mayo, así como las aceras alrededor del mercado público y construcción de tres calles en los chalets construidos por el Instituto Nacional de la Vivienda.
Los moradores de El Llano, una colonia agrícola con 8 mil habitantes, piden a gritos que se les arreglen sus calles y que se construyan una iglesia y una escuela.
Elías Piña fue un valiente dominicano que libró junto con el General Antonio Duvergé, la célebre batilla de Cachimán.
Según las versiones, Elías Piña murió sable en mano junto a la trinchera del enemigo en de los ideales patrios.
Esa ciudad se llamó antes Comendador, en honor de su fundador el Comendador de Lares, que lo hizo allá por el 1600, en época de la Colonización.
Se dice que los primeros dominicanos que se establecieron en esa población fronteriza lo fueron entre otros José Sierra y Marcelino Minier.
Elías Piña escaló a cabecera de provincia en el 1942 y recibió gran impulso con la construcción de obras y residencias para los empleados administrativos que allí trabajaban.
Hace poco, que sus moradores hicieron una exposición al Gobierno pidiéndole que a la provincia, que ahora se llama Estrelleta, se le dé el nombre de Elías Piña y que al municipio se le restablezca el de Comendador, como homenaje justiciero a su fundador, el Comendador de Lares.
Un clima envidiable posee Elías Piña, ya que está a una altura considerable sobre el nivel del mar.
Está a tan sólo 1 kilómetro y 600 metros de la frontera con Haití, por lo que se espera que el Gobierno ponga sus mejores empeños por mejorar su ornato y la vida de sus gentes.