Cada 25 de julio se celebra la festividad de San Santiago, también conocido en las escrituras como Santiago Apóstol o Santiago el Mayor, y que es el santo patrono de Santiago de los Caballeros, la Ciudad Corazón.
Precisamente en honor de Santiago se celebran las fiestas patronales de esta ciudad, que incluyen actividades religiosas, culturales y caritativas y ofrendas florales. Las más importantes tienen lugar en la catedral de la ciudad, que lleva el nombre de este santo.
Según los datos históricos más conocidos, la ciudad de Santiago fue fundada el 25 de julio de 1495 por el almirante Cristóbal Colón, y con el paso del tiempo se convirtió en una urbe dinámica y laboriosa, al punto de que hoy es la segunda ciudad más importante de la República Dominicana.
Hasta nuestros días es común, aunque cada vez menos, la celebración de la novena de Santiago Apóstol, una jornada en la que se reza, se entonan cánticos religiosos y se pide la intercesión del santo para solucionar problemas de salud de los creyentes y todo tipo de dificultades o simplemente para agradecer favores otorgados por su mediación.
Los santiagueros forman un pueblo trabajador, cordial y amistoso, con una proverbial solidaridad y sobre todo con una identidad que mantienen siempre en alto, que muestran con humildad, pero también con orgullo, por más que se encuentren en las antípodas.
Como centro de actividad comercial, industrial y de servicios, con un significativo aporte a la economía nacional, Santiago de los Caballeros cuenta con una rica tradición histórica y es sede de uno de los más calificados centros académicos del país, la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra o PUCMM.
Éxito al comité de las patronales y que en este nuevo aniversario del Patrón Santiago la celebración sirva para mantener latente la memoria histórica de esta comunidad, que la identidad profundamente dominicana que caracteriza al santiaguero, esa idiosincrasia tan especial que lo distingue entre todos los pueblos de la tierra, continúe vigente en las generaciones venideras y permanezca como un sello indeleble de nuestra amada patria.