Los conductores se quejan de que los tapones son el pan de cada día en las calles y reclaman soluciones inmediatas para ese problema que se agrava tiempo
Conductores públicos y privados aseguraron que durante la tarde del martes algunos semáforos del Distrito Nacional estuvieron registrando fallos, lo que causó un embotellamiento más fuerte de lo normal.
Tras un recorrido por algunas avenidas del Distrito Nacional algunos conductores expresaron que durante la tarde del martes los semáforos estaban dislocados porque las luces amarillas no dejaban de parpadear, hecho que aumentó el caos vehicular, expresaron algunos choferes. “Ayer por la tarde, yo iba en la avenida Ortega y Gasset con John F. Kennedy y la luz amarilla del semáforo comenzó a parpadear y no cambiaba”, declaró un chofer de una ruta que tiene su base en el sector de Cristo Rey.
Este hecho también se registró en otras avenidas del país, dijeron taxistas del sector de Arroyo Hondo.
Este hecho ocurre tras las declaraciones del abogado de la empresa Transcore Latam, SRL, Carlos Balcácer, quien habló que de las consecuencias que puede acarrear la desconexión del sistema semafórico, tras la suspensión del contrato de esta empresa con el Instituto Nacional de Tránsito y Transporte Terrestre (Intrant).
El abogado Balcácer expresó que parte del contrato entre estas dos instituciones implica que la empresa tenga el control del sistema de semáforo y que, suspenderlo significa que se “desemaforice” la ciudad, generando un caos, añade.
Se recuerda que Transcore Latam es la empresa que ganó la licitación para la contratación del servicio de modernización, ampliación, supervisión y gestión del sistema integral del centro de control de tráfico y la red semafórica del Gran Santo Domingo.
De igual manera, es necesario resaltar que dicho contrato que se ejecutó por un monto de más de RD$1,317 millones, fue suspendido por la Dirección General de Contrataciones Públicas (DGCP), por encontrar indicios de irregularidad.
Los tapones complican el desenvolvimiento de la gente. Johnny Rotestán
En otro ámbito los conductores entrevistados se quejaron de la presencia de los agentes de la Dirección General de Seguridad de Tránsito y Transporte Terrestre (Digesett), al decir que no ven la necesidad de que en los semáforos que están funcionando haya un miembro de esta institución.
“Cuando los semáforos trabajan no hay tapón, en cambio cuando los Amet están en las calles los embotellamientos duran horas”, afirmaron los empleados del volante.
Diferentes conductores reclamaron que por la preferencia que demuestran los agentes hacia uno de los lados de las avenidas en muchas ocasiones tienen que desviarse, por lo que el gasto en combustibles en ocasiones se vuelve insostenible
Es necesario recordar que con la salida del sol, comienza el caos en las arterias principales de entrada y salida al Distrito Nacional y la provincia de Santo Domingo. Los últimos levantamientos arrojan que en ambas demarcaciones se realizan cada día un total de 3 millones 97 mil 106 viajes.