Tecnología

Consejos para usar Instagram de forma responsable y evitar que te «hackeen»

Si tiene más de 30 años, seguramente recuerde perfectamente cómo era el mundo antes de que las redes sociales comenzasen a transformarlo irremediablemente. A comienzos del siglo XXI, algo antes de la aparición de Facebook, seguíamos empleando las cabinas de teléfono y el correo tradicional para mantener el contacto con familia y amigos. Ahora, gracias a servicios como Instagram, que acaba de cumplir 10 años de existencia, es posible compartir imágenes, vídeos y mensajes con cualquiera. Independientemente del país donde se encuentre y de la hora que sea.

Todo es posible con un «gadget» inteligente en la mano y conexión a internet. «Las redes sociales han supuesto toda una revolución. Permiten al usuario compartir información, aficiones, intereses como creador de contenidos. Incluso abrir vías de negocio. Su uso también ayuda a estar menos solo, especialmente en estos tiempos de pandemia. Aunque, evidentemente, no son un sustituto de compartir tiempo en persona con los demás. Tu vida no puede girar en torno al móvil», explica a ABC Ofelia Tejerina, jurista y presidenta de la asociación española Internautas.

A pesar de los beneficios que ofrece, Tejerina hace hincapié en que la «app» fotográfica propiedad de Facebook, al igual que el resto de redes sociales, debe ser empleada con cuidado. Para sacar provecho de Instagram, y evitar que se convierta en un problema para el usuario, la mayoría de expertos en protección de datos y ciberseguridad recomiendan tomar una serie de precauciones. Y es que no hace falta tener millones de seguidores para sufrir un ciberataque y ver cómo tu información queda al alcance de cualquiera. Solo es necesario dejar sin cubrir algún agujero de seguridad.
Cuidado con la sobreexposición

En España un 62% de los usuarios utilizan redes sociales, lo que equivale a unos 29 millones de personas. Según el estudio Digital 2020 elaborado por We Are Social con datos previos a la crisis sanitaria, la media de uso diario de las plataformas llega casi a las dos horas. Otro informe, en este caso elaborado por la consultora App Annie el pasado mes de abril, apuntaba que el la pandemia ha provocado un aumento en el uso de estas plataformas del 20%.

instagram

Y esa sobreexposición puede convertirse en un problema. «Aunque no hace mucho que vivimos con las redes sociales, debemos ser consciente de los riesgos. Que van desde la adicción al movil o el contacto con personas dañinas, hasta la exposición absoluta de nuestras vidas y nuestra información de tal modo que cualquier cosa puede convertirse en un arma», dice la presidenta de Internautas.

Subir toda nuestra vida a sitios como Instagram puede acarrerar graves problemas de seguridad más allá de internet. El pasado mes de junio la empresa de servicios tecnológicos NordVPN lanzó un comunicado alertando de los riesgos de publicar más información personal de la cuenta a través de vídeos o fotografías. Ya sea compartiendo imágenes de la calle en la que se encuentra el domicilio del usuario o, simplemente, la geolocalización.

«Las visualizaciones y reacciones al contenido de tus redes sociales te hacen sentir bien, pero el fondo de tus imágenes y videos también proporciona información para los criminales que rondan por la red», explicaba entonces Ruby Fernández, jefa de comunicación de la compañía.

A este respecto, una buena medida que se puede tomar es limitar los usuarios que pueden ver el contenido que se sube. Esto se puede hacer accediendo a Instagram y pinchando en las opciones «Configuración», «Privacidad» y convirtiendo la cuenta en privada. Con esta funcionalidad solo podrán ver el contenido los seguidores. Asimismo, será necesario aceptarlos en adelante para que puedan acceder a las fotografías y los vídeos.
No todas las contraseñas sirven

Si es importante tener mucho cuidado con lo que se publica, porque puede permitir a un tercero malicioso ubicar al internauta, también es imprescindible proteger el acceso a las redes sociales. Eso pasa, en primer lugar, por contar con una contraseña sólida y cambiarla con frecuencia.

«Una buena contraseña debe tener una longitud considerable y ser inteligible. El usuario no debe utilizar en ningún caso una palabra que tenga que ver con él, como sería su mes de nacimiento o su nombre. También debe contar con números, letras y signos especiales, como serían asteriscos o símbolos del dólar», señala a ABC el «hacker» ético Deepak Daswani. Asimismo, es importante no repetir claves en varios servicios y cambiarlas periódicamente.
Intentos de suplantación…

Las cuentas de Instagram alojan en su interior una gran cantidad de información sobre el dueño, por lo que hay que protegerlas y no compartirlas con nadie. Los ciberdelincuentes llevan tiempo dedicando esfuerzos al robo de credenciales de redes sociales como la «app» fotográfica. Algo que no solo les permite acceder a todos los datos de la víctima, también les da la posibilidad hacerse pasar por ella y lanzar ataques dirigidos contra sus contactos.

«Hay muchas variantes, pero lo más habitual en estos casos es que los ciberdelincuentes envien correos suplantando a un tercero para poder conseguir las credenciales de acceso a la red social. Esto se puede hacer, por ejemplo, solicitando a la víctima que se autentifique empleando sus credenciales de plataformas como Facebook o Instagram», apunta a este diario Eusebio Nieva, director técnico de la empresa de ciberseguridad Check Point en España y Portugal.

El experto expone que en estos casos, para conseguir engañar a la víctima, es bastante habitual que los estafadores añadan en el correo un enlace que redirige a una página similar a la de la empresa o la institución a la que están suplantando. «La excusa puede ser cualquiera, desde un concurso hasta un supuesto problema de seguridad en alguna aplicación. Suelen emplear mensajes que llaman a actuar de forma urgente y que buscan evitar que el usuario piense antes de hacer lo que le piden».

Para evitar los peligros de este tipo de ataques, el director técnico de Check Point recomienda emplear la autenticación en dos pasos. Una función que obliga a confirmar el intento de inicio de sesión cada vez que alguien intenta acceder a una cuenta de Instagram desde un dispositivo desconocido. Para activarla hay que abrir la aplicación y pulsar sobre «Configuración», «Seguridad» y, por último, «Autenticación en dos pasos».
Siempre actualizada

Como con cualquier otra aplicación, es fundamental mantener Instagram actualizado. Normalmente, las nuevas versiones vienen acompañadas de soluciones de brechas abiertas que pueden ser explotadas por los cibercriminales. Por ello, los expertos en ciberseguridad recomiendan no dejar pasar el tiempo y realizar la actualización correspondiente en el mismo momento en que está disponible.

Asimismo, en caso de que se vaya a descargar la «app» en un «smartphone» o una tableta debe asegurarse de que la operación se realiza en la tienda oficial. Google Play Store en el caso de los dispositivos con sistema operativo Android y App Store en el de aquellos que cuentan con iOS, es decir, los iPhone y iPad.

Tomado de https://www.abc.es