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Provincias Dominicanas

En Nuevo Amanecer están agobiados por una cañada insalubre

Entre las aguas sucias, ratones muertos, insectos y basura, así viven los moradores de este sector, quienes se encuentran intranquilos por la contaminación de cada día y enfrentan las consecuencias de sus hijos enfermarse producto de la cañada.

La comunidad Nuevo Amanecer en Los Alcarrizos se encuentra desesperada por la contaminación de aguas residuales producidas por la cañada, que durante temporadas de lluvias arropa las casas de los alrededores.

Entre las aguas sucias, ratones muertos, insectos y basura, así viven los moradores de este sector, quienes se encuentran intranquilos por la contaminación de cada día y enfrentan las consecuencias de sus hijos enfermarse producto de la cañada.

Leonardo de la Cruz, residente a orillas de la cañada, dijo sentirse incómodo con la situación del sector, ya que ha generado enfermedades a los niños del entorno y malos ratos para las familias que se ven afectadas cuando llueve debido a las inundaciones.

«A todas las casas se les mete el agua porque cuando tiraron las tuberías las pusieron en la misma calle y ahora esa cañada cuando se rebosa se nos mete a la casa. El nivel de agua cuando llueve es terrible y salen un reguero de ratones y cucarachas; los niños viven con sarpullido, en mi casa siempre hay mosquitos y tengo que vivir fumigando», afirmó De la Cruz, incómodo por la situación que prevalece en su sector.

Añadió que desde que pasan unos minutos de lluvia, la cañada que cubre la comunidad los arropa y toda el agua contaminada entra a sus hogares. «Esa casa se llena de agua desde que dura 20 minutos lloviendo y hasta que siga encontrando donde correr, sigue e inunda todas las casas. Yo espero que vengan a hacer algo por nosotros y esa cañada la anulen y tiren cada tubería por donde debería de estar. Estamos abandonados por las autoridades del ayuntamiento porque ellos rompieron la cañada para arreglarla y jamás volvieron», aseguró.

Se sienten olvidados

Ignacia Ruiz es madre soltera de tres niños y dentro de las vicisitudes del sector se ha visto obligada a abandonar su hogar y construir una nueva casa más adelante de la anterior, para evitar que las aguas contaminadas de la cañada paren en su residencia, pero eso no fue un impedimento para ser afectada por la problemática.

«Tuve que abandonar esa casa porque se llenaba de agua y hasta con materia fecal e insectos; eso me tiene a mi niño enfermo, todo se me dañaba, ya no sabía dónde ponerlo y tuve que salir. El niño lo he tenido que llevar al hospital varias veces por neumonía», contó con tristeza al recordar los malos momentos cuando se producen lluvias.

Para Steven Beltré, el martirio de limpiar la cañada no cesa, ya que se encarga de darle mantenimiento para que el desagüe natural no expulse contaminación en los alrededores, pero este siente que el problema no acabará hasta que la cañada sea eliminada de la comunidad.

«Cuando eso se llena llega hasta la mitad de mi casa, porque de este lado está más tapado por la basura; yo me he puesto a sacar basura junto a otros vecinos y comoquiera toda la basura que baja desde otros lugares viene a parar aquí y se entra a la casa desde que llueve. Mi mamá se enferma mucho por los mosquitos y el agua negra que sale de la cañada le hace más daño cada día. De eso salen hasta ratones y heces fecales porque hay tuberías que salen desde los baños de las casas y eso llega a parar donde uno», manifestó Beltré, preocupado por la salud de su madre por la contaminación en la zona.